NUESTRA HISTORIA

Llevamos desde 1861 como fabricantes de cheddar inglés, un título que refleja nuestro compromiso con el auténtico queso cheddar. Como maestros queseros de cuarta generación, nos enorgullece continuar una tradición que nuestra abuela, Ivy Clothier, cultivó con sus recetas y métodos originales.

Seguimos utilizando la receta familiar secreta que perfeccionaron nuestros abuelos y el mismo cultivo iniciador de más de 100 años, y maduramos nuestro cheddar en cajas de madera que se mantienen siempre a la misma temperatura. Nunca tomamos atajos, y trabajamos con el mismo esmero y atención al detalle que las generaciones que nos precedieron.

El resultado es un cheddar excepcional, de carácter cremoso, desmenuzable y con notas de nuez, porque se elabora como debe ser: con dedicación y respeto. Ese es también el secreto de nuestra cremosa mantequilla, batida lentamente con nata de suero. A lo largo de los años hemos ganado innumerables premios, pero lo que más nos enorgullece es saber que, si nuestros abuelos probaran nuestro cheddar o nuestra mantequilla, pensarían que los hicieron ellos mismos.

Igual de comprometidos estamos con el cuidado de la tierra. Los Clothier hemos vivido y trabajado en esta hermosa parte del mundo durante siglos, y cuidamos el campo como si fuera parte de la familia. Estamos entre los productores de alimentos más sostenibles de Europa, utilizamos energía verde y agua reciclada, y trabajamos constantemente para proteger y mejorar las colinas y los valles que tanto amamos.

Creemos que compartir una buena comida es parte importante de la vida; por eso, nos aseguramos de que la nuestra sea la mejor posible: cheddar y mantequilla bien hechos, al estilo Wyke.

Nuestro cheddar

Cada queso cheddar es diferente, y el nuestro no es una excepción. Si tuviéramos que destacar sus puntos clave, apostaríamos por su cremosidad, su textura desmenuzable y su suavidad. Así es como nos gusta a nosotros (y a millones de clientes), y así ha sido durante más de 160 años.